Bienvenidos a Café Barichara, un café hecho en el calor de un hogar. Hace muchos años, en la finca en la que vivíamos había café sembrado, mis hijos y mi esposo al recordar que sus abuelos habían trabajado con el café decidieron experimentar para recuperar ese legado que les habían dejado, ese conocimiento ancestral. Así que nos pusimos manos a la obra y comenzamos vendiendo el café en unas bolsas de mercado que sellabamos con una cuchara caliente, pero cada libra que vendíamos estaba y están cargadas de muchísimo amor. Gracias a nuestra resiliencia, a través de los años hemos ido mejorando en el proceso, el empaque, la etiqueta, han sido 10 años de mucho trabajo, de haber iniciado con la molienda a mano y ahora después de ver crecer a nuestros hijos, somos mi esposo y yo trabajando por Café Barichara, él se encarga del trabajo pesado, seca el pergamino, arregla el café, lo tuesta, lo empaca y lo etiqueta. Yo me encargo de las ventas, voy buscando tiendas en dónde venderlos para que más personas conozcan nuestro amado café.

Lo que siempre está garantizado es la calidad, un buen sabor y la invitación es a que vengan a la finca y vean todo el proceso, nos conozcan y se enamoren de nuestra marca, estamos sólo a 12 minutos de Barichara.